Guriezo en la historia de España
Un año más, insistimos en la necesidad de poner en valor los orígenes y la historia de nuestro pueblo.
La historia nos viene de lejos, pero en lo que nos toca, muchas veces pasa totalmente inadvertida. Es una pena que de forma mayoritaria en nuestro pueblo se desconozca su historia, sus raíces,... Es una pena que se desconozca incluso el significado de nuestro escudo, el mismo que muchos llevan a gala aún desconociendo su origen y significado.
Imaginen la escena: 16 de julio de 1212, lunes para ser más exactos. Tres reyes españoles se dan cita cerca de Despeñaperros. Enfrente, como adversario, tienen al ejército almohade de Miramamolín Al Nasir con el objetivo de reconquistar para el Islam la España cristiana e invadir Europa.
En el bando español, unos 27.000 hombres y tres reyes: el rey de Castilla, Alfonso VIII y los reyes de Navarra (Sancho VII) y Aragón (Pedro II). El de León (Alfonso IX) se quedó en casa. En el bando de los musulmanes, unos 60.000 hombres...Pintaban bastos para los nuestros.Y digo los nuestros porque a las ordenes del vasco Diego López de Haro varios jinetes guriezanos plantaron cara al enemigo.
La vanguardia cristiana estaba encabezada precisamente por Diego López de Haro. La batalla fue una auténtica escabechina, una masacre. Para que se hagan una idea, de los 500 jinetes a las ordenes de Diego López de Haro, tras dos cargas de caballería a galope tendido, tan sólo le quedaban 40 jinetes. Conscientes de que lo que estaba en juego ya no era ganar la batalla sino de vender caro el pellejo, el rey castellano desenvainó la espada , se puso al frente de la linea de reserva, hizo ondear su pendón y volviéndose al arzobispo Jiménez de Rada pronunció la famosa frase de "Aquí, señor obispo, morimos todos" e inició la carga a galope tendido. Los otros dos reyes, al ver la situación, no les quedó otra que echarle huevos y cargar con todo lo que les quedaba espada en mano. La carga fue épica: tres reyes cabalgando juntos ante un ejercito enemigo superior en fuerzas, sabiendo que estaba todo prácticamente perdido, vendiendo caro su pellejo...El resto es historia, se vinieron arriba y doblegaron al enemigo, obteniendo la victoria.
Esta victoria supuso un punto de inflexión importantísimo en el proceso de la Reconquista y el declive de la presencia musulmana en la Península. Fue, sin lugar a dudas, un acontecimiento crucial en la historia de nuestro país, de la propia Europa, y Guriezo dejó su huella, ahora prácticamente olvidada.
La historia nos viene de lejos, pero en lo que nos toca, muchas veces pasa totalmente inadvertida. Es una pena que de forma mayoritaria en nuestro pueblo se desconozca su historia, sus raíces,... Es una pena que se desconozca incluso el significado de nuestro escudo, el mismo que muchos llevan a gala aún desconociendo su origen y significado.
Imaginen la escena: 16 de julio de 1212, lunes para ser más exactos. Tres reyes españoles se dan cita cerca de Despeñaperros. Enfrente, como adversario, tienen al ejército almohade de Miramamolín Al Nasir con el objetivo de reconquistar para el Islam la España cristiana e invadir Europa.
En el bando español, unos 27.000 hombres y tres reyes: el rey de Castilla, Alfonso VIII y los reyes de Navarra (Sancho VII) y Aragón (Pedro II). El de León (Alfonso IX) se quedó en casa. En el bando de los musulmanes, unos 60.000 hombres...Pintaban bastos para los nuestros.Y digo los nuestros porque a las ordenes del vasco Diego López de Haro varios jinetes guriezanos plantaron cara al enemigo.
La vanguardia cristiana estaba encabezada precisamente por Diego López de Haro. La batalla fue una auténtica escabechina, una masacre. Para que se hagan una idea, de los 500 jinetes a las ordenes de Diego López de Haro, tras dos cargas de caballería a galope tendido, tan sólo le quedaban 40 jinetes. Conscientes de que lo que estaba en juego ya no era ganar la batalla sino de vender caro el pellejo, el rey castellano desenvainó la espada , se puso al frente de la linea de reserva, hizo ondear su pendón y volviéndose al arzobispo Jiménez de Rada pronunció la famosa frase de "Aquí, señor obispo, morimos todos" e inició la carga a galope tendido. Los otros dos reyes, al ver la situación, no les quedó otra que echarle huevos y cargar con todo lo que les quedaba espada en mano. La carga fue épica: tres reyes cabalgando juntos ante un ejercito enemigo superior en fuerzas, sabiendo que estaba todo prácticamente perdido, vendiendo caro su pellejo...El resto es historia, se vinieron arriba y doblegaron al enemigo, obteniendo la victoria.
Esta victoria supuso un punto de inflexión importantísimo en el proceso de la Reconquista y el declive de la presencia musulmana en la Península. Fue, sin lugar a dudas, un acontecimiento crucial en la historia de nuestro país, de la propia Europa, y Guriezo dejó su huella, ahora prácticamente olvidada.
De aquella batalla, la casa Marroquina trajo para Guriezo la Cruz que engalana el escudo del Real Valle de Guriezo. El campo de Azur y la Cruz provienen de la batalla de Las Navas de Tolosa y la bordula de gules con ocho cruces de San Andrés en oro corresponden a la batalla de Baeza, en 1227 (Sí, también los de Guriezo volvieron a ser vanguardia en la batalla. Me imagino la escena al grito de "¿a qué no hay huevos?")
Imaginen esta historia en otro país, en otro pueblo... correrían ríos de tinta, películas, cada 16 de julio se rememoraría el acontecimiento, mercado medieval incluido... En fín..
Me conformaría con que la gente sepa el origen y significado de nuestro escudo de armas y que, al menos, los 16 de Julio sean declarados día de fiesta local y se rememore el acontecimiento en la Casa Marroquina como corresponde, entre otras cosas, izando la bandera de Guriezo, no la de ahora de la cuál casi nadie tiene claro su origen, sino una bandera que contenga los elementos de nuestro escudo.
Salud
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